
Después de esta hermosa frase que todavía no es célebre, pregunto ¿ustedes qué hacen con esas hermosas imágenes de los calendarios que se vencieron? ¿Las tiran? Yo no puedo... mi religión no me lo permite... y se acumulan.
Hace un par de años, después de un grupo de lectura en inglés que hicimos sobre mujeres en el arte, Irene Jaievsky me regaló un precioso calendario de Georgia O’Keefe. Guardé las 12 imágenes y ayer se me ocurrió qué hacer con ellas.

Las piedras sobre las que me apoyé para cruzar este río en particular las pusieron Tung Ken Lam (hexágono derivado de su Jitterbug), Francis Ow (módulo de 60º para el tetraedro) y Tomoko Fuse (baldosa triangular) y éste es el resultado:

Y ya que hablamos de calendarios, espero que el próximo que pongan marque muchos días buenos.